shopping-bag 0
Productos : 0
Subtotal : 0.00
Carrito Finalizar compra

Single Blog Title

This is a single blog caption

RAYO – XEREZ, SOMOS DE PRIMERA

Llegó el día, el más largo que se recuerda en varios años. La ocasión lo merecía. Había ganas, más bien necesidad, de soltar todo lo acumulado durante una temporada tan convulsa como inolvidable, de celebrar, de olvidar, de salir a la calle. Y Vallekas celebró, olvidó, salió a la calle. Nada más terminar el partido del Elche en Vigo, con empate a dos, el rayismo tiñó de franjirrojo el barrio, acudiendo a esa fuente que tres temporadas atrás fue testigo de nuestra salida del infierno. Ahora fue testigo de nuestra vuelta a la gloria.

Pero no todo estaba cerrado. El recurso del Granada aún está pendiente de resolución y obligaba a vencer al Xerez para sellar el ascenso matemáticamente. Sí, en la supuesta mejor Liga del mundo las chapuzas se suceden una tras otra, nada nuevo bajo el sol. Y precisamente el sol sorprendió a muchos rayistas, aún de celebración, justo cuando el Estadio de Vallekas comenzaba a prepararse para vivir uno de esos partidos que quedan grabados en la memoria colectiva de todo el rayismo.

El Fondo, más abarrotado, entregado y descontrolado que nunca. Era el día perfecto para el ya tradicional tifo a la argentina de ‘Esta es tu hinchada la descontrolada’. Nueva pancarta en la parte superior, clásicas tiras, banderas, rollos de papel, papelillos, banderones, pelotas y hasta sombrillas. No faltó ni la gigante camiseta del equipo, la que queremos que se recupere en nuestra vuelta a Primera con el escudo de la Agrupación Deportiva, que después de moverse de un lado a otro del Fondo comenzó a desplazarse por todo el estadio, de Tribuna a Tribuna. No, no era El Monumental de River, pero el Infierno de Vallekas lo pareció por momentos.

Hemos animado en Segunda B, nos hemos dejado la garganta cuando éramos goleados en casa, no hemos parado cuando menos lo merecía el equipo. Y ahora era momento de disfrutar, de alucinar cuando en el minuto 24 de partido el rayismo se pone en pie para lucir con orgullo la bufanda.

Lo aprendimos hace muchos años, cuando jugábamos contra Fuenlabrada, Cobeña o equipos filiales, y hemos marcado el camino a todos los que han ido llegando. Vallekas es pasión, ambiente, cánticos y ánimos al equipo. Aquí no hay silbidos, no se le da la espalda a la Agrupación por mucho que se pierda o por muy mal que se juegue. Sólo se exige que los que juegan den en el césped lo mismo que nosotros en la grada. El Fondo es el motor, pero todos caminamos juntos.

Eso, como tantas otras cosas, nos hace diferentes. Lo somos en la derrota, también en la celebración. Todos pedimos que no se invadiera el campo, que pudiéramos disfrutar de la fiesta con los nuestros, y tras reprochar todo el estadio a los pocos que saltaron al césped, pudimos celebrar con los jugadores un ascenso inolvidable. Primero fue Movilla agarrando el micro de la megafonía del Fondo, después Yuma subido en el atril del speaker marcándose ‘La Vida Pirata’, también Dani abrazándose uno a uno a los que estaban sobre la pancarta del grupo y, para rematar, Armenteros se subió al larguero, justo antes de meterse en nuestro Fondo para agradecer el apoyo de todos y marcarse algún cántico. Para entonces el césped ya estaba lleno de rayistas que sonreían más que nunca, lloraban, se abrazaban y alguno miraba al cielo recordando a esos que se marcharon y no pudieron disfrutar del ascenso.

Definitivamente, esto es diferente. Un equipo de gente humilde, donde jugadores y seguidores son uno, sabiendo que tan importante es uno como el otro, una afición que ni quiere ídolos ni necesita idolatrar a nadie, y que con la plantilla bañándose en cerveza en el vestuario, continuó la celebración en el estadio, consciente de que este ascenso, más que de nadie, es de los seguidores, de los que se unieron como nunca antes para defender el Club y echar a la escoria que nos arruinó, de los que no abandonaron en los cuatro años de Segunda B, de los que se han ido sumando por el camino. Este ascenso es del rayismo, de Vallekas, y cómo no, este ascenso es de Bukaneros. Somos de Primera. Hemos vuelto.