Homenaje a Álvaro

Partido en Vallekas frente al Espanyol. Una vez más, encuentro jugado en viernes, nada más y nada menos que el tercer día que nos toca jugar entre semana en casa, en una temporada que lleva tan solo 10 jornadas. Por si esto fuera poco, nuestra animación sigue parada, debido al inmovilismo de una directiva incapaz de solventar una situación totalmente contraproducente para los intereses de nuestro equipo.

Estos son algunos de nuestros condicionantes actuales, pero,  todos ellos quedan relegados a un segundo plano cuando somos conscientes de que uno de los nuestros no volverá a pisar su estadio, ni compartir grada una vez más con su grupo. El joven Álvaro perdió la vida recientemente en un accidente de tráfico, por lo que familiares, amigos y compañeros de grada se pusieron manos a la obra para realizar un sentido homenaje en su recuerdo.

Durante la previa en nuestro lugar habitual, de nuevo los banderones, las bufandas, los bombos y los cánticos, daban color a ese ambiente mágico que nunca se debió de perder en Vallekas. En torno a las 19.30, comenzaba el corteo con alrededor de unas 500 personas presentes. Al principio del mismo, se situaron los allegados a nuestro compañero fallecido, con una pancarta que rezaba «Varo eterno». Ligeramente más atrás, el grueso del grupo y bastantes peñistas con una pancarta propia en la que se podia leer «Álvaro siempre con nosotros, descansa en paz».

Bajando la Avenida de la Albufera, se sucedían los cánticos en memoria del compañero desaparecido, y se hizo repaso de parte de nuestro cancionero. Una vez situados en la puerta del fondo se procedió a leer el comunicado que el grupo había preparado para la ocasion. Un comunicado cargado de sentimiento, leído prácticamente codo con codo con unos familiares que apenas podían contener la emoción. Una vez leído, un aplauso cerrado despediría a Varo como merecía, no sin antes obsequiar a su novia y a sus padres con banderas del grupo, y cantar todo el rayismo unido un «eterno Varo» que llegó a retumbar allá donde nuestro amigo quiera que se encuentre.

Pero aún había mucho más, ya que dentro del Estadio esperaban  dos grandes sorpresas para los familiares de Álvaro, que nos acompañaron también en la grada. La plantilla del club saltaba al césped con una camiseta con el número 6 y la inscripción «Varo eterno», posando con la misma para la foto oficial.

E instantes antes de comenzar el encuentro, llegaba el momento cumbre, con un minuto de silencio conmovedor que fue guardado por toda la afición, a la vez que en el videomarcador se mostraba una foto de nuestro compañero, y en la grada una enorme pancarta rezaba: «Álvaro en nuestros corazones».

El emotivo homenaje podría haber salido de 10, si no fuera por que se propuso para sanción a uno de nuestros miembros por no haber comunicado previamente la realización del corteo. Ante una triste situación como esta, parece que el uniforme no es compatible con la humanidad; y aquello que hemos hecho en otras ocasiones tales como corteos-protesta o festivos, recibimientos al equipo, etc, esta vez sí debía de ser castigado. Una evidente falta de tacto que ensombreció lo que fue uno de los más emocionantes actos que se recuerdan en el Estadio de Vallekas.

ÁLVARO SIEMPRE CON NOSOTROS